Xbox, a lo largo de los años, ha sido fuente de numerosas experiencias increíbles. Sin embargo, a menudo no es la historia principal o la campaña lo más memorable, sino las pequeñas cosas.
Estos son los minijuegos cortos, improbables e infinitamente rejugables que son ladrones de tiempo. Desde desafíos de ritmo hasta peleas de bar, aquí están los mejores minijuegos de Xbox de todos los tiempos que dejaron a los jugadores diciendo: “solo una ronda más”.
1. Gwent – The Witcher 3: Caza salvaje
Gwent, el minijuego de cartas coleccionables de The Witcher 3, se volvió viral en todo el mundo. La combinación de construcción de mazos, estrategia y suerte convirtió este pasatiempo ficticio en una adicción en la vida real para una gran cantidad de jugadores.
Ni siquiera Geralt dejaría su campaña de caza de monstruos para jugar “sólo un juego más”. La profundidad y simplicidad de Gwent fueron las principales razones por las que se lo consideró el mejor minijuego de Xbox, y fue tan elogiado que luego se convirtió en un título separado.
2. Filete de cinco dedos – Serie Red Dead Redemption
El ascenso, el momento del golpe y el pánico de Five Finger Fillet forman una trilogía eterna de elementos. Five Finger Fillet, el juego del cuchillo, es de hecho una prueba de destreza, velocidad y valor. Ya sea que se trate de un salón polvoriento o de un desafío amistoso, la tensión entre el viejo Oeste y el riesgo se captura de manera auténtica, transformando un simple desafío reflejo en un enfrentamiento con las manos sudorosas.
Un hecho notable es que Xbox ha sido el centro de todo tipo de actividades secundarias durante mucho tiempo, desde carreras de caballos hasta juegos rápidos basados en habilidades que imitan las emociones del mundo real. Algunos jugadores llegan incluso a afirmar que las tragamonedas en línea y otras actividades aleatorias similares se han abierto paso discretamente en el mundo digital, ofreciendo así a los usuarios de consolas un poco de tensión y emoción estilo casino sin la necesidad de realizar una visita física a un casino. Esto sirve como recordatorio de que a veces no se trata de ganar el premio mayor sino de la emoción del giro o, en este caso, el alivio de no apuñalarte la mano.
3. Bolos – Grand Theft Auto IV
Una de las frases más divertidas que jamás haya existido en un juego es probablemente “¡Primo, vamos a jugar a los bolos!”. El minijuego de bolos en GTA IV no era sólo una cosa aburrida que podías saltarte; En realidad, era un juego muy bien cuidado y, en cierto modo, muy relajante y agradable para jugar contra todas las cosas violentas que sucedían en Liberty City.
La física era auténtica, los controles muy agradables y el lado social con personajes como Roman hizo que todo fuera más adorable. Para muchos jugadores, este simple juego de pelotas se convirtió en su descanso habitual de GTA.
4. Lucha de brazos – Yakuza 0

La serie Yakuza no tiene reparos en llegar al extremo cuando se trata de minijuegos, y la pulseada en Yakuza 0 es simplemente energía pura, cruda y repentina. Es una mezcla de fuerza, sincronización y una loca resistencia a presionar botones.
Cada pelea suena como una batalla de anime culminante, con la multitud vitoreando y movimientos finales increíblemente impresionantes. La combinación de la habilidad del jugador y la teatralidad lo convierte en uno de los desafíos rápidos más memorables jamás vistos en Xbox.
5. Karaoke – Serie Yakuza
El karaoke, aunque es una actividad Yakuza, merece una mención especial. Si uno no hubiera jugado a los minijuegos, no habría adivinado en absoluto cómo se combinaban tan impecablemente el humor, la música y la personalidad de éste.
Cualquiera que sea la opción que elijas, ya sea gritar “Judgment – Shinpan” como Kiryu o simplemente ver a Majima pasar un buen rato, el karaoke en Yakuza no es solo un juego de ritmos; es un desorden salvaje de personajes y caos, que está hecho para ser glorificado. Parece que divertirse con la actuación es más importante que obtener una puntuación alta.
6. Y el campo de tiro – Resident Evil 4 (Remake)
El campo de tiro siempre ha sido una de las características más memorables e icónicas de la serie Resident Evil, y en Resident Evil 4 Remake, se ha llevado a otro nivel, donde lo que era solo práctica se convierte en perfección.
Aunque el énfasis está únicamente en la precisión, el campo de tiro también incluye el ritmo, el tiempo de recarga y la obtención de ese gratificante rango S. Junto con la belleza de los gráficos del remake y la existencia de tablas de clasificación competitivas, la ejecución de esta misión secundaria se ha convertido en una reconfortante, aunque breve, distracción de la agonía de la historia principal, lo que, a su vez, la ha vuelto adictiva.
7. La Arena – Fábula II
Antes de que se reconocieran los logros de la comunidad, la Arena de Fable II era el lugar que te daba la misma sensación de logro, que provenía principalmente de los desafíos de combate del tipo basado en oleadas. Fue realmente una inmersión profunda en el control de las armas, los hechizos y las decisiones.
La forma en que el juego te recompensaba era muy atractiva y la sensación de volverte más fuerte te hacía sentir realmente como un héroe. Cada uno de los aventureros de Albion sólo podía hacer que su viaje hasta allí fuera más real.
8. Blitzball – Final Fantasy X (mediante compatibilidad con versiones anteriores)
Por cierto, el deporte siempre ha sido parte de la serie Final Fantasy y, por lo tanto, debido a la compatibilidad con versiones anteriores, ha sido accesible para los jugadores de Xbox. No sería exagerado decir que es uno de los minijuegos más complicados y cautivadores.
Había componentes de waterpolo, estrategia y juegos de rol en el juego, y era tan adorable que fácilmente podría haberse convertido en un juego de deportes separado. En realidad, la mayoría de los jugadores estaban tan involucrados en el manejo de su equipo de Blitzball que apenas lograron avances en la historia principal del juego.
 
							