Creo que si viajaras en el tiempo, alrededor del siglo XIV, dondequiera que estuviera Dante Alighieri en ese momento, y le mostraras Hell Maiden, una secuela roguelike, Bullet Hell, de construcción de mazos, estilo anime de los 90, esencialmente fan fiction de su Divina Comedia, probablemente diría algo como “Mama mia” y moriría en el acto por temor a lo que su propia creación engendraría cientos de años después. Sin embargo, por muy ridículo que sea el concepto (y es ridículo), la demostración es bastante buena.
Para compararlo con otros juegos, Hell Maiden es como una mezcla de Hades y Vampire Survivors, este último lidera la carga en el juego momento a momento. Juegas como el propio Dante, o en este caso, ella misma, que regresa al infierno después de haber llegado a Paradiso, con amnesia. ¡Y así comienza una vez más la ascensión al cielo!
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Cuando comienzas, estás armado con la pluma de Dante, que envía ráfagas de fuego cada segundo, aproximadamente, similar al látigo de Vampire Survivor. Puedes tener hasta cuatro armas (al menos ese parece ser el límite en la demostración), dichas armas representadas como cartas. Subir de nivel te da la oportunidad de elegir entre tres cartas nuevas, que la mayoría de las veces serán modificadores de armas, haciendo cosas como agregar más proyectiles, aumentar el daño, ese tipo de cosas, pero ocasionalmente obtendrás nuevas armas para usar.
Si sacas una carta modificadora duplicada, puedes fusionarla con otra para mejorarla o colocarla en un arma diferente si así lo deseas. Incluso hay algunas cartas que pueden afectar a varias armas dependiendo de dónde las coloques.
Al igual que en otros clones de Vampire Survivor, no tienes mucho control sobre tus ataques, aunque puedes apuntarlos en una dirección mientras te mueves en otra, por lo que sí tienes cierto control. Esto también se siente sólido, en ningún momento me sentí frustrado o abrumado por lo que había en la pantalla, sé que cada una de mis muertes fue mi culpa. Todo está bastante entrelazado, especialmente impresionante considerando que cada vez que se lanza el juego, lo hará en acceso anticipado.
El elemento Hades surge más que nada en forma de estructura narrativa. Al morir, te llevarán al Foro, un área central donde puedes pasar el rato y charlar con varios poetas del Limbo, como Homero, Virgilio y Horacio. Parece que hacerte amigo de ellos te permite desbloquear otras armas iniciales, y todas te permiten elegir diferentes armas y cartas modificadoras también.
Todo esto está envuelto en un estilo artístico de anime vagamente de los 90 increíblemente bien representado, al menos en lo que respecta a las escenas de diálogo. El resto del juego es principalmente pixel art, pero hay movimientos especiales que puedes usar y que causan daño en toda la pantalla después de algunas escenas estelares y completamente animadas que muestran estas versiones anime femeninas de, me gustaría recordarles, poetas muy reales.
En su mayor parte, simplemente combinar géneros, incluso si se hace bien, no me hace interesarme inherentemente en un juego, pero con su concepto extremadamente bien realizado, actualmente estoy convencido de Hell Maiden. Sólo espero que nadie inventa el viaje en el tiempo para que Dante no muera antes de lo previsto.
Hell Maiden aún no tiene una fecha de lanzamiento, pero cuando la tenga, se lanzará en acceso anticipado. Puedes incluirlo en la lista de deseos en Steam ahora.